Los termopares sin vainas son especialmente adecuados para las aplicaciones en las que la punta del sensor se monta directamente en los taladros (por ejemplo, componentes de una máquina) o directamente en el proceso para cualquier aplicación con medios químicamente no agresivos o abrasión.
Su montaje en una vaina requiere la versión con rosca deslizante de "spring-loaded" (muelle de carga) para asegurar el ajuste óptimo de la punta de la sonda al fondo de la vaina y para evitar cargas críticas sobre dicha punta. El montaje normalmente es directo al proceso. También se pueden utilizar elementos de fijación tales como roscados, tuercas locas, etc..
La parte flexible de la sonda es un cable de aislamiento mineral (mantel). Este mantel se compone de un tubo exterior de acero inoxidable con los conductores interiores aislados con una masa cerámica compactada, adecuada también para aplicaciones con temperaturas elevadas.
Opcionalmente se pueden montar transmisores analógicos o digitales WIKA al cabezal.